17/9/12

"La primavera" de Sandro Boticelli



Temple sobre tabla • Renacimiento
203 cm × 314 cm
Galería Uffizi, Florencia, Italia

Existe una interpretación clásica en la que se intenta explicar a cada personaje de la obra:
Mercurio: Este dios se identifica por su calzado con alas. Tiene una actitud de mirar hacía el cielo, que se interpreta como una unión con el más allá. Esta vestido con un manto rojo que cae de forma asimétrica, señal de que se estaba representando una escena mítica. 
Las tres Gracias: Están representadas como tres jóvenes casi desnudas y luciendo elaborados peinados. Son las servidoras de Venus y reciben el nombre de Gracias. Puede representar a la danza de la vida.
Venus: Es eje a la composición. Está representada como una Madonna. Aparece enfundada en un vestido y un manto, que caen de forma asimétrica, como en el caso de Mercurio. Es el centro físico del cuadro y también el centro moral, al simbolizar y ser representada como la creadora de la Naturaleza, que hace nacer y crecer a los seres vivos. En definitiva, sería la Humanitas, es decir, unidad, armonía, entre naturaleza y civilización.
Flora: Es la única figura del grupo que mira al observador y que tiene la intención de esparcir sus flores más allá de la escena meramente representada. 
Ninfa Cloris y el Viento Céfiro: representan el amor pasional, pues el viento trata de tomar y poseer a la ninfa.
También se podría citar las fuentes literarias en las que se inspiró Botticelli para realizar el cuadro: principalmente Ovidio. Tanto en los "Fastos" (un calendario poético que describía las festividades romanas; Botticelli representaría dos escenas de la narrativa de Ovidio: la persecución erótica de Cloris por parte de Céfiro y su posterior transformación en Flora), como  las "Metamorfosis". Otras posibles fuentes pueden ser el poema didáctico-filosófico  "De Rerun Natura" de Lucrecio o, incluso, las "Odas" de Horacio.