23/5/12

Homenaje a Carlos Fuentes

Carlos Fuentes Macías (nacido en Panamá, el 11 de noviembre de 1928 - Fallece en México, D. F., el pasado15 de mayo de 2012).
Fue uno de los escritores más conocidos de finales del siglo XX, candidato al Premio Nobel de Literatura en reiteradas ocasiones y autor de novelas y ensayos, entre los que destacan "Aura", "La muerte de Artemio Cruz", "La región más transparente" y "Terra Nostra"


Carlos Fuentes Dixit:

"Un artista sabe que no hay belleza sin forma pero también que la forma de la belleza depende del ideal de una cultura. El artista trasciende, parcial y momentáneamente, el dilema, añadiendo un factor: no hay belleza sin mirada. Es natural que un artista privilegie a la mirada. Pero un gran artista no invita no sólo a mirar sino a imaginar".

"¿La creación está inconclusa? Si. Y éste es el requisito por donde, inevitablemente, Dios se me cuela al mundo. Si Dios nos hizo a su imagen y semejanza, ¿Dios contiene el mal humano? Yo contesto, si.
Somos reflejo también de la parte mala o inconclusa de Dios. Obramos para completar a Dios.

"Libertad es búsqueda de libertad. Nunca la alcanzaremos completamente. La muerte nos advertirá que hay límites a toda historia personal. La historia, que perecen y se transforman las instituciones que en un momento dado definen la libertad. Pero entre la vida y la muerte, entre la belleza y el horror del mundo, la búsqueda de libertad nos hace, en toda circunstancia, libres."

Homenaje a 20 años del fallecimiento de "Don Ata"

"Los ejes de mi carreta" (Atahualpa Yupanqui)

Porque no engraso los ejes
me llaman abandonao
si a mi me gusta que suenen

pa' que los quiero engrasar

Es demasiado aburrido
seguir y seguir la huella
andar y andar los caminos
sin nada que me entretenga


No necesito silencio,
yo no tengo en quien pensar
Tenia, pero hace tiempo,
ahora ya no tengo más

Los ejes de mi carreta
nunca los voy a engrasar

Video homenaje de Facundo Cabral y Alberto Cortés



8/5/12

Murió "Caloi", el creador de "Clemente" - su última tira...

Carlos Loiseau, más conocido por todos como "Caloi", falleció a los 63 años. Sin embargo, deja una gran obra entre los que se destaca el querido Clemente, quien tenía una tira diaria en el diario Clarín. 
En la contratapa de la edición de hoy, Clemente reflexiona sobre la edad del Universo y las sucesivas devaluaciones que tuvo la moneda argentina. "Según los científicos, va a llegar un día en que el Universo va a morir, pero eso ocurrirá dentro de un número de años igual a 10 seguido de 100 ceros".  El chiste remata con un problema que vivieron varias generaciones de argentinos, como es la eliminación de "ceros" de la moneda. "Si lo pasan a pesos ley, después a australes y luego a pesos de nuevo, se ahorran un montón de ceros", ironizó. 
La última tira de Clemente publicada hoy en el diario Clarín. | Foto: Gentileza diario Clarín

7/5/12

Isabel Allende: "Dos palabras" (Eva Luna)

Eva Luna, es el nombre de una novela escrita por Isabel Allende en 1987. Fue traducida al inglés por Margaret Sayers Peden.La protagonista nace en la morada de un excéntrico científico y es huérfana de madre desde pequeña. Trabaja desde muy joven como empleada doméstica. Su vida es una lucha constante por la supervivencia, aunque gracias a la ayuda de muchas personas que aparecen en su vida, logra convertirse en una mujer madura.Eva es capaz de inventar maravillosas historias lo que le permite entablar amistad con Huberto Naranjo.Es la autora ficcional de Los cuentos de Eva Luna.
La novela toma muchos elementos del realismo mágico. Aun la historia polícial del país, a través de varias décadas tras cada mitad del siglo XX, tiene muchas semejanzas con el país de origen de la autora, Chile, la geografía y el contexto social de la historia muestran una sociedad más similar a la de Venezuela, país en que vivió al exiliarse.

"Dos palabras" (Cuentos de Eva Luna)

Belisa Crepusculario es el nombre de la protagonista quien dedica su vida a vender palabras. De naturaleza errante, Belisa recorría extensos caminos para llevar noticias u ofrecer sus servicios a quien los necesitase. Había incluso quienes la esperaban pacientemente y pagaban cinco centavos para escuchar algunos versos de memoria, o nueve para que escriba cartas de enamorados, o doce para aprender insultos novedosos dedicados a enemigos irreconciliables. También sabía cuentos inspirados en sus viajes. Todos sabían quien se había muerto, que boda sucedió recientemente o los pormenores de la guerra civil. Además, si la tarifa por sus servicios rebasaba los cincuenta centavos, Belisa regalaba una palabra secreta al cliente quien tenía la seguridad de que esa palabra sólo le pertenecía a él y nada más a él.
Había nacido en una zona miserable, un desierto cruel que tomó para sí a cuatro hermanos menores. Consiente de que ella podría ser la siguiente huyo del lugar, un encuentro casual con un periódico cambio su destino. Al enterarse del contenido de aquellas palabras ordenadas, se dió cuenta del poder de las mismas y que se podía comerciar con ellas. Con sus ahorros le pago a un cura para que le enseñara a leer y escribir, se compró un diccionario que leyó por completo y después tiró al mar pues no quería estafar a sus clientes con palabras envasadas.
Cierto día, Belisa vendía argumentos de justicia cuando un grupo de jinetes irrumpió en la plaza. Los hombres obedecían ordenes del Coronel quien a su vez se ocupaba de la guerra civil. Los hombres venían por Belisa por ordenes directas de su jefe. Fue así como Belisa se encontró con el hombre más temido del país.
El Coronel deseaba encontrar a aquella mujer cuya fama había llegado hasta sus oídos para que le ayudara en su propósito de ser presidente de la nación. Cuando Belisa llegó ante él supo que se encontraba frente a un hombre solitario y triste. El Coronel estaba harto de ser tan temido y quería que Belisa le escribiera un discurso lo suficientemente convincente para poder materializar su sueño y llegar a la presidencia por votación popular y no por la fuerza como hasta entonces acostumbraba. Belisa se puso a trabajar, meticulosamente clasificó y desechó palabras, una vez terminado el trabajo, se dispuso a leerlo varías veces para que el coronel se lo aprendiera pues no sabía leer. Todos quedaron conmovidos por el discurso de Belisa y el coronel se convenció de que servía de verdad. Llegado el momento de hacer cuentas, Belisa le ofreció dos palabras que por derecho al pago merecía. El coronel no se interesaba por aquellas palabras pero, feliz por el resultado se prestó a oírlas. Una atracción insinuada se materializó cuando Belisa se inclinó hacía él y le murmuró sus dos palabras.
Todo el país fue recorrido por el coronel quien repetía una y otra vez el mismo discurso para la gente, y sus dos palabras para sí. Sin embargo, mientras el tiempo pasaba, la salud del coronel se vió extrañamente mermada, se le veía cansado y ajeno a todo. Un asistente del coronel le preguntó el motivo de su desgano y éste le contestó que era obra de aquellas dos palabras. Nada se podía hacer pues aquellas palabras sólo le pertenecían a él, de modo que se mandó traer de nuevo a Belisa para que deshiciera aquel encanto.
Todo mundo se quedó sin habla cuando aquella joven fue presentada de nuevo ante el coronel quien cambió su expresión de furia por una más humana. Belisa le tomó de la mano luego de observarse ambos detenidamente, el hombre más temido del país se dejo llevar, dócil, por aquella joven.

4/5/12

Video Destacado del Mes: Clapton-Knopfler-Collins: "Same Old Blues" en vivo



Arte Pop: Recordando a Keith Haring

Desde muy pequeño Keith (que nació un 4 de mayo de 1958 en Reading, Pensilvania) empezó a dibujar inspirándose en los dibujos animados de la televisión. Estudió arte en la Ivy School of Art de Pittsburgh, donde comenzó a hacer serigrafías para imprimir en camisetas. Y posteriormente continúo sus estudios en la Escuela de Artes Visuales de Nueva York durante 1978 y 1979, donde estuvo influenciado por Keith Sonnler y Joseph Kossuth que le animaron a formarse como artista conceptual tras la experimentacion con la forma y el color.
En el verano de 1979 realizó una performance titulada Poetry-Word-Things, en el Club 57 de Manhattan. En 1980 comenzó a hacer grafitis, dibujando con rotulador imágenes similares a dibujos animados sobre anuncios en el metro de Nueva York. Más tarde le siguieron unas historietas dibujadas con tiza blanca sobre los paneles negros del metro reservados para publicidad. Fue arrestado en varias ocasiones por dañar la propiedad pública.
Keith Haring intentó combinar en su obra el arte, la música y la moda, rompiendo barreras entre estos campos. La iconografía era una mezcla de elementos sexuales con platillos volantes, personas y perros, animales y figuras danzando; a los que se añadieron más tarde figuras corriendo, bebés gateando, halos, pirámides, televisiones, teléfonos y referencias a la energía nuclear; el tratamiento de Keith Haring de temas como el poder y el miedo a la tecnología sugiere angustia y refleja su inquietud moral. Su primera exposición individual fue en la galería Tony Shafrazi de Nueva York, en 1982.
El soporte pictórico que utilizaba Haring era variado y accesible (papel, fibra de vidrio, lienzo, piezas de acero esmaltado, camisetas, vasos y vaciados en escayola de obras de arte conocidas); sus fuentes son el arte esquimal, africano, maya y de los aborígenes, así como la caligrafía china, los all-over de Alechinsky, Andy Warhol y Mark Tobey, a partir de los cuales evolucionó hacia su estilo semiabstracto característico, una especie de new wave azteca que recuerda a Pollock y a Penck. Gruesas líneas negras bordean figuras esquemáticas en unas composiciones dominadas por un horror vacui evidente que vibran con una energía irresistible y llamativa.
El estilo de Haring refleja el ethos de la generación pop y de la cultura callejera del East Village (Manhattan). Intentó plantear las cosas de la manera más simple posible. Como Warhol, Haring abrazó la cultura demótica, es decir, una combinación de moda, arte y música, rompiendo barreras entre estas manifestaciones para darles una mayor extensión; este factor es básico para entender su éxito comercial en todo el mundo, en varios géneros, incluyendo murales, escultura, posters y pintura corporal. En 1986 pintó un trozo del muro de Berlín. En ese mismo año abrió la boutique Pop Shop, en la que vendía sus productos. En 1989 creó la Fundación Keith Haring cuyo objetivo es luchar por la solución de los problemas sociales. Murió víctima del sida en Nueva York, el 16 de febrero de 1990.