20/5/11

Bajo el tilo

Ayer te despediste
con natural encanto.
Pediste una sonrisa
no lágrimas, ni llanto.

Busqué un camino
para allí seguirte.
Estire mis manos,
conseguiste erguirte.

Te tengo prohibida
en mi cruel deseo.
Solo, con miedo,
soñando espero.

Veras mi alma
serán las nuestras
las horas y el tilo
aromas del tiempo...