31/8/12

Thomas Mann -"...un estado de libertad inicial..." - fragmento de "La Montaña Mágica"


Capítulo I - La llegada
(...)
Dos jornadas de viaje alejan al hombre -y con mucha más rázon al joven cuyas débiles raíces no han profundizado aún en la existencia- de su universo cotidiano, de todo lo que él consideraba sus deberes, intereses, preocupaciones y esperanzas; le alejan infinitamente más de lo que pudo imaginar en el coche que le conducía a la estación. El espacio que girando y huyendo, se interpone entre él y su punto de procedencia, desarrolla fuerzas que se cree reservadas al tiempo. Horas tras hora, el espacio determina transformaciones interiores muy semejantes a las que provoca el tiempo, pero de manera alguna las supera.
Igual que éste, crea el olvido; pero lo hace desprendiendo a la persona humana de sus contingencias para transportarla a un estado de libertad inicial; incluso del pedante y el burgués hace, de un sólo golpe, una especie de vagabundo. El tiempo, según se dice, es el Leteo. Pero el aire de las lejanías es un brebaje semejante ,y si su efecto es menos radical, en cambio mucho más rápido.
Thomas Mann - La Montaña Mágica